MÉRIDA, Yucatán.- Durante poco más de tres años Israel Cruz Hernández gozó de una estabilidad económica, ganada a pulso con caminatas y dando la cara por el obradorismo cuando aún comenzaba el movimiento en Yucatán.

Su nombramiento como servidor de la nación, en la Delegación del Bienestar, fue una recompensa a su años de fidelidad y entrega a Morena, que en el 2018 llegó al poder.

Durante tres años tuvo empleo estable hasta que el 6 de abril de 2021 le pidieron que se presente ante Eduardo Ortiz, secretario particular del delegado Joaquín Díaz Mena, más conocido como «Lechitas», quien le dijo que ya no tenía trabajo a partir de esa fecha.

No fue el único al que corrieron, pues también dieron de baja por instrucciones de «Lechitas» a unos 50 servidores de la nación.

Desde entonces Israel Cruz ha sobrevivido a base de chambitas para mantener a su familia. La afectación no es solo económica, sino incluso psicológica, reconoció.

«Soy de clase obrera, persona de a pie, solo tengo secundaria, por eso le reclamo a Huacho Díaz, no quiere atenderme para que me explique por qué me sacaron», dijo Israel Cruz en entrevista exclusiva para este medio.

La del domingo no fue la primera vez que lo encara, pues anteriormente lo hizo durante una visita del presidente López Obrador en la Base Aérea Militar 8 (sur de Mérida).

«Ahí le pedí que me reciba para que me explique por qué me dieron de baja, me dijo que sí, pero su gente nunca me buscó, por eso el domingo (durante el aniversario de Morena) lo llamé mentiroso», recordó.

Cada vez que puede, Israel Cruz hace pública la traición de «Lechitas» contra los servidores de la nación. Por ejemplo, durante la marcha de cierre de campaña por la consulta de revocación de mandato gritó consignas contra Díaz Mena.

Incluso por un momento logró arrebatarle el micrófono a los del carro de sonido y sus reclamaciones contra «Lechitas» se escucharon por las calles de Mérida.

«Los servidores de la nación nos pusimos la madriza durante la campaña presidencial de 2018, dimos la cara, nos partimos el lomo por el movimiento. Luego cuando AMLO ganó seguimos trabajando para recabar información de los adultos mayores, de la gente con discapacidad, de los jóvenes», recordó.

«Por eso nos dieron nuestro nombramiento y en mi caso me asignaron a la delegación del Bienestar, todo me lo gané trabajando, no como la gente de profesión que llegó con Díaz Mena, esos licenciados pero más bien son zánganos porque nosotros hacemos el trabajo, nosotros cargamos la piedra y ellos se lucen, ellos no salen a la calle, están en sus oficinas con aire acondicionado», lamentó.

También ya envió dos oficios a «Lechitas» y lo busca cada vez que puede, pero Díaz Mena no tiene respuesta porque a los servidores de la nación los sacaron ilegalmente, pues ellos nunca les entregaron sus nombramientos de baja.

Ellos siguen apareciendo en el sistema de central y otros cobran por ellos. Todo indica que esa gente que ahora está cobra por ellos son allegados a «Lechitas» que ha hecho de la delegación del Bienestar un lucrativo negocio familiar y político.