MÉRIDA, Yucatán.- Un extranjero subió a la pirámide de Kukulcán en Chichén Itzá. El turista, originario de Polonia, ignoró los cordones de prohibición y lo bajaron los guardias en medio de la desaprobación de los demás visitantes, uno de los cuales incluso le dio con un palo en la cabeza.

Los guardias tuvieron que protegerlo para evitar que la gente volviera a agredirlo. Mientras se lo llevaban, el polaco se llevaba las manos a la cabeza para sobarse del palazo que le propinaron.

El 21 de noviembre del año pasado, una mujer subió a la pirámide de Kukulcán y estuvo a punto de que la lincharan los demás turistas.

La polémica fue viral, incluso bautizaron a la turista como #LadyChichénItzá. A su paso, camino a las afueras de la zona arqueológica, la gente, sobre todo mujeres, se acercaba a arrojarle agua a la extranjera mientras le gritaban “Cárcel, cárcel, cárcel” o “cárcel, por idiota”.

Cuando llegó a la cima de la pirámide, la mujer hasta hizo un bailecito para festejar su «hazaña», pero no sabía lo que le esperaba al bajar. Se dijo que le pusieron una multa de cinco mil pesos en la comisaría de Pisté, comunidad a la que pertenece la zona arqueológica más conocida de Chichén Itzá.