MÉRIDA, Yucatán.- Tras las intensas lluvias, los yucatecos sufren ahora los embates de moscos «gigantes», cuya picadura es más dolorosa que la de los mosquitos habituales, conocidos como cúlex.

Estos «súper moscos», también conocidos como moscos de monte, no son habituales en las zonas urbanas, sino que como su nombre lo indica están en los montes y cerca de manglares y ciénegas.

Se aproximan a las zonas urbanas cuando ha llovido mucho, como sucede después de un huracán o alguna tormenta tropical. Los meridanos ya conocieron sus embates después del huracán Isidore, en el 2002 y después de las lluvias intensas de la tormenta tropical Cristóbal, en el 2020.

Aunque son fáciles de matar, atacán en «moloch», es decir, masivamente. En el brazo de una persona pueden posarse hasta cinco o seis al mismo tiempo. También atacan la espalda, las piernas y la cara.