Por el Día de San Juan, fieles de Mazatlán, Sinaloa, llevaron en procesión a las imágenes del santo como niño y adulto por calles de Villa Unión hasta las orillas del río Presidio, donde se realizó la tradicional ceremonia del baño al enviado de Dios para anunciar a Cristo.

Mojado, con agua lanzada por los fieles, la imagen del santo era invocada para que llueva.

Y es que en la zona de la procesión, los agricultores necesitan agua para regar sus cultivos y así ganarse la vida.

Los devotos bañaron a las efigies de San Juan y rezaron para pedirle que garantice buenas lluvias, que necesita la agricultura, en los próximos 12 meses.

Dicen que si se que todo se hace con fe, pues San Juan les hará el milagro. La fe, pues, es esencial para obtener el milagro solicitado

San Juan Bautista, en su figura de niño y de adulto paseó, en andas por las calles de la sindicatura Villa Unión. Esta tradición que tiene más de 120 años es parte de la fe católica en la que sus devotos piden a este santo un buen temporal de lluvias.

San Juan Bautista, tal como lo hizo con Jesús en el río Jordán, fue bañado mientras los devotos pedían al Creador por buenos aguaceros que puedan reactivar los sectores productivos y traigan la abundancia a esta sindicatura, la más grande de Mazatlán.

Decenas de personas, entre niños y adultos, también se unieron al baño porque consideran que una vez que San Juan Bautista toca las aguas del río Presidio, estas se vuelven benditas y traerán a los bañistas la fortuna y la gracia durante todo el año.