Por recurrir al 'cuboiler' acaba quemado en la parte baja del abdomen y más allá
«¡Huay, qué heladez! Voy a poner mi cubo de agua para bañarme», dijo el joven Alberto Mézquita Montalvo, quien pensaba tomar una agradable y tibia ducha a jicarazos, pero algo salió mal.
A falta de boiler o calentador, a este joven de 19 años y vecino de la ciudad de Izamal no le quedó más remedio que recurrir al «cuboiler», es decir, calentar el agua en la estufa en un recipiente metálico, de preferencia una cubeta de metal.
Todo iba bien. Puso a hervir el agua en la estufa y cuando el líquido quedó como para «pelar cochino», le apagó al fuego y con el recipiente en las manos se dirigió al baño.
Sin embargo, en un momento determinado el recipiente se movió y el agua caliente le cayó encima a Alberto, quien acabó con quemaduras de segundo en la parte baja del abdomen y a punto estuvo de que el agua hirviendo le llegara hasta el bajo vientre.
El joven fue atendido en el Hospital O’Horán de Mérida, a donde fue trasladado por la naturaleza de sus lesiones.
Que mejor compre ahora su boiler
jajajaja me gusta su redaccion mezlca muy bien palabras muy yucatecas. bien por formal prision nos informa y nos divierte