Usaba a su novia para robar borrachos en los "afters"
Este día, el Juzgado Segundo Penal sentenció a tres años de cárcel a los veracruzanos Patricia Victoria Libreros Camarero y Rogelio Benítez Romero, quienes le robaron a un nuevo amigo al que conocieron en un bar.
La pareja le robó cuando el incautó los invitó a un «after» en su casa.
En su momento se dijo que el hombre usaba a la mujer, quien era su novia, para «enganchar» borrachos en los bares y luego robarles en sus viviendas.
Por este motivo, la titular de ese Juzgado, Rubí Guadalupe González Alpuche, los halló culpables del delito de robo con violencia, por denuncia de Vicente Antonio Noh Millán.
Igualmente se les impuso 62 días multa, equivalentes a 3,805.56 pesos, mismos que si no pagan podrían cambiar por 31 jornadas de trabajo a favor de la comunidad o pasar 124 días más en prisión.
Pese a ello, podrían evitar pasar todo ese tiempo en prisión si pagan otros $23,00o, de los que 10 mil pesos serían de multa y $13,000 de condena condicional.
La condena empieza a contar desde 18 de octubre del 2013, fecha en la que fueron detenidos.
Según las constancias del expediente, el 17 de octubre de 2013, Vicente Antonio acudió al bar “Los Flamboyanes” y conoció a los veracruzanos, con los que estuvo departiendo hasta que a las 11 de la noche los invitó al «after» en su casa, en la calle
23 entre 66 y 68 de la colonia San José Tecoh.
Una vez en el sitio continuaron la parranda, pero más tarde, la pareja se le fue encima y lo amarraron de pies y manos, tomaron un televisor, dos teléfonos celulares, una licuadora, una guitarra, dos hamacas, una laptop y otros artículos.
Huyeron, pero fueron detenidos cuadras adelante por elementos de la SSP.
Cuando dio su versión de los hechos, Rogelio Benítez admitió el hurto, aunque dijo que lo hizo en venganza porque el sujeto se quiso propasar de su pareja cuando él entró al baño.
Aseguró que le reclamó que quisiera tener relaciones sexuales con su pareja a la fuerza y.el anfitrión se quedó dormido, por lo que aprovechó para amarrarlo y robar las cosas.
No obstante que la veracruzana fue usada para «enamorar» borrachos y, junto con su pareja, robarles cuando la invitaban a sus casas, ninguno de los afectados denunció, al parecer por vergüenza.
puro wach!! fuera waches!! regresense a su selva!!