Mérida, Yucatán, 26 de octubre de 2014.- En la penúltima jornada del Festival Internacional de la Cultura Maya (FICMaya) 2014, la trova yucateca se dejó escuchar con su romanticismo a través de las voces y las cuerdas de Los Juglares, agrupación que demostró en el escenario por qué es uno de los protagonistas más representativos de este género.

Ante el público reunido en la Escena Yucateca, en el Pasaje de la Revolución del Centro Histórico meridano, el cuarteto con más de 20 años de trayectoria interpretó reconocidos clásicos creados tiempo atrás por los maestros Luis Demetrio, Armando Manzanero, Manuel Rivas y Luis Espinoza, así como canciones de otras regiones.

La velada musical inició con la descripción arquitectónica de esta tierra yucateca con “Porte de venado y belleza de faisán”, que desprendió los primeros aplausos de la gente, así como algunas voces para acompañar a las mismas del grupo, que a lo largo de su historia ha visitado escenarios tanto nacionales como extranjeros.

Después de “A Yucatán”, Los Juglares le dieron un toque de sonidos frescos a la serenata “Quisiera ser golondrina”, lo cual alegró la noche y la llevó al punto del romanticismo que provoca la expresión poética de la legendaria trova del sureste mexicano.

Los recuerdos musicales siguieron circulando en los oídos con la interpretación de “La puerta” y “Quién será” de Luis Demetrio, canciones que fueron la antesala para un pequeño homenaje al compositor más reconocido de la época actual, Armando Manzanero, con una versión de “Como yo te amé”.

Luego, los Juglares llevaron a otras latitudes combinando ritmos yucatecos y del son huasteco, para que en voz y coro de los cuatro integrantes entonaran emotivamente “Malagueña salerosa”, en dedicación a todas las mujeres que integraban al público. 

El viaje continuó al norte del país con el clásico “El sinaloense” al estilo propio de la agrupación y con el que pretendían terminar la velada, pero tras el grito de “otra, otra, otra” no abandonaron el escenario y demostraron su habilidad con las cuerdas al entonar “El mariachi”.

El conjunto se encuentra integrado por José y Fernando Vadillo, así como José y César Marrufo, quienes estuvieron acompañados por la batería de Luciano Basto y las percusiones de Luis Aguilar.