Sentencian a 20 años de prisión a chofer que secuestró a la hija de su
patrón
El chofer Edwin de Jesús Keb Cauich fue sentenciado
a 20 años de cárcel por el secuestro de una niña de 5 años de edad, por la
que exigió rescate de 10 mil pesos para entregarla sana y salva a su madre.
El Juez Séptimo Penal, Lic. Jorge Andrés Vázquez
Juan, también le impuso una multa de 500 días de salario equivalente a los
29 mil 540 pesos o 250 jornadas de trabajo, en caso contrario se le aplican mil
días más de reclusión.
Igualmente fue condenado al pago de 5 mil pesos por
concepto de reparación del daño moral a favor de la menor J. G. V. por conducto
de su madre, y se le niegan al sentenciado los beneficios de ley, por no reunir
los requisitos necesarios.

Llega y no está su hija

Como se publicó en su momento, los hechos
ocurrieron el 5 de noviembre de 2012, cuando Elizabeth Vargas dejó a su hija,
de entonces cinco años, en una escuela primaria de la colonia Díaz Ordaz. Al
regresar por ella se extrañó de no verla en el lugar donde siempre la esperaba,
de manera que le preguntó a la maestra, que le respondió que el chofer había
ido por la menor  y que como la niña lo conocía,
se la entregaron.
En la escuela le dijeron que la abuela había
llamado para pedir que la niña fuera entregada al chofer, pero al llamar la
señora Elizabeth a su madre le dijo que ella no se había comunicado a la
escuela.
De pronto recibió un mensaje de texto en su celular,
en el que se le pedían 10 mil pesos para recuperar a su hija y le daban un
número de cuenta para que depositara el dinero.
Más tarde llegó otro mensaje en el que se le exigía
el dinero que aún no depositaba. Para ese entonces la policía ya había
implementado un operativo para dar con el secuestrador, que fue ubicado en la
calle 97-D con 66-D de la colonia Obrera, donde fue detenido y reconoció
haberse llevado a la niña. También dijo que la tenía en la casa de una hermana
en la colonia San Luis Sur Dzununcán, hasta donde la policía lo trasladó y,
tras recuperar a la menor, ambos quedaron detenidos. Sin embargo, sólo a Keb
Cauich se le procesó.
La pareja sentimental del individuo, Noemí Rosana
Pech Ku, fue la que hizo la llamada a la directora fingiendo ser la abuela de
la niña, pero igual fue liberada bajo las reservas de la ley.

Tenía deuda en Banco Azteca

Edwin de Jesús tenía un adeudo con Banco Azteca de
23 mil pesos, pero le habían ofrecido que podía solucionar el problema con 9
mil pesos.
Al verse sin salida ideó el secuestro de la hija de
su jefe, y compró un celular barato con el que mandó los mensajes. Llevó a la
niña a casa de su hermana María Elizabeth, quien no estaba enterada de la
situación, y le pidió que la cuidara a cambio de darle 500 pesos.
En su declaración, dijo que la pareja de su jefe le
pidió que fuera a la escuela por la niña y que como tenía mucho trabajo, pensó
en ir a buscarla temprano, pero cuando llegó a la escuela no se la quisieron
entregar y por ello le pidió a su pareja que dijera que era la abuela para poder
llevársela.

Sin embargo, en lugar de llevarla a la casa de una
señora conocida como doña Conchi, donde siempre atienden a la niña, alegó que
le quedaba más cerca la casa de su hermana, al otro extremo de la ciudad, en
San Luis Sur Dzununcán.