Andreas Johansson se está llevando todas las miradas del fútbol mundial gracias a su pésima actuación. El jugador del Norrkoping de Suecia simuló una falta de la peor manera.

Johansson buscó engañar al árbitro y pegó su cara contra el brazo de Mohamed Bangura y se dejó caer, como acusando un codazo del rival.

Esto generó más que la indignación, la risa de Bangura, que no daba crédito a lo que veía, ya que no había cometido ninguna falta.

«Solo pensé: ‘¿Qué está haciendo?'» , explicó Bangura tras el partido. «¿Lo has visto? ¡Dios mío! Si no le toqué. Por eso me dio la risa», agregó el futbolista del AIK Solna.

Johansson no fue amonestado por fingir, pero se llevó un mal recuerdo por fingir de manera grotesca la falta.

El AIK Solna se dedicó a jugar y se llevó la victoria por 2-1 sobre el Norrkoping del increíble Johansson.

Fuente: Deporte Total