El Gobernador Rolando Zapata Bello se sumó a las brigadas de voluntarios de la segunda Campaña Masiva de Descacharrización y visitó las colonias Bojórquez y Madero, lugares donde exhortó a los vecinos a participar en estas acciones que buscan disminuir la proliferación de mosquitos transmisores del dengue y chikungunya.

Uniformado con uno de los chalecos que identifican a los brigadistas de la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY), el mandatario arribó a la calle 114 con 59 de la colonia Bojórquez. Ahí platicó con los residentes y constató que la mayoría de ellos ya habían acudido a la esquina de esa arteria para depositar sus cacharros.

“Es una excelente idea para que podamos estar más tranquilos y seguros de que no nos vamos a enfermar de dengue o de otra cosa. Ya hacía falta porque ha estado lloviendo mucho y tenemos cubetas y llantas que son un riesgo, además de que los patios a veces no los limpiamos. Es una oportunidad muy buena”, le comentó la señora Ligia Argáez Chulim al Gobernador mientras personal de los Servicios Integrados para la Conservación del Estado (Sicey) y la Secretaría de Obras Públicas (SOP), subían los recipientes a los volquetes.

Tras atender las solicitudes de los vecinos e invitarlos a que aprovechen este programa, mediante el cual se pretende recolectar más de 713 toneladas de potenciales criaderos de mosquito, Zapata Bello se dirigió a la calle 20 con 25 de la colonia Francisco I. Madero donde saludó a los asistentes y con la ayuda del brigadista de la SSY Armando Manzanilla Chi comenzó a reunir los reservorios para ser trasladados a los diferentes rellenos sanitarios.

“Es magnífico que exista esto, porque de otra forma no podemos deshacernos de estas llantas viejas. Los de la basura no se las quieren llevar y estamos con el pendiente de que puedan aumentar los mosquitos. Ahora estamos muy tranquilos aquí apoyando”, explicó doña Griselda Chan Poot.

Acompañado de habitantes de esta zona, el titular del Poder Ejecutivo del Estado agradeció a los trabajadores de las distintas dependencias que se han adherido a esta estrategia y puntualizó la importancia de que la ciudadanía participe llevando sus cacharros a los sitios señalados y permitiendo que los voluntarios fumiguen en sus respectivas colonias.

“El que venga aquí y veamos que está comprometido, que de verdad está vigilando que todo salga bien y se haga como debe ser, nos da confianza. Acaban de fumigar por mi casa, y ahora estoy sacando todo lo que ya no me sirve y que puede ser lugar para que se incrementen los mosquitos”, dijo la señora Fulvia Casanova Nabté.

En esta edición, se cuentan con 330 volquetes, 88 vehículos de supervisión, más de cinco mil voluntarios y la coordinación entre instancias estatales, federales y municipales, además del Ejército Mexicano, alianza que facilita acciones de fumigación, abatización y recolecta de criaderos de mosquitos.