Anticipan festejo de la Santa Cruz en Mérida

Con anticipación al domingo, albañiles meridanos colocaron desde el sábado las ofrendas que realizan de manera tradicional con motivo del Día de la Santa Cruz.

Desde el mediodía podían verse en muchas construcciones de la ciudad las cruces adornadas con papel de china y flores en lo alto de las obras.

Consultados al respecto, tras tomar sus respectivas caguamas y comer charritos con chile, «maistros» y encargados de obra indicaron que decidieron colocar la ofrenda desde este sábado porque mañana no trabajan, y hacerlo el lunes sería ya muy atrasado.

Algunos ingenieros también anticiparon los festejos para los albañiles, que en esta ocasión, por la difícil situación económica, fueron mayormente sencillos, y consistieron en básicamente tacos de chicharrón o carnitas, además de refrescos. En algunos casos hubo cervezas pero de manera limitada, a fin de que las celebraciones no acaben en pleitos.

Un poco de historia de la Santa Cruz

Religiosamente, esta festividad parecen tener su origen en el hallazgo por Santa Elena de la cruz donde murió Cristo, pero lo cierto es que el arraigo popular de la fiesta proviene de ciertas celebraciones de los romanos.

La historia, con mucho de leyenda, narra que en el emperador Constantino I el Grande, en el sexto año de su reinado, se enfrenta contra los bárbaros a orillas del Danubio, en una batalla cuya victoria se cree imposible a causa de la magnitud del ejército enemigo. Una noche Constantino tiene una visión en el cielo en la que se le apareció brillante la Cruz de Cristo y encima de ella unas palabras, «In hoc signo vinces» (Con esta señal vencerás). El emperador hizo construir una Cruz y la puso al frente de su ejército, que entonces venció sin dificultad a la multitud enemiga. De vuelta a la ciudad, averiguado el significado de la Cruz, Constantino se hizo bautizar en la religión cristiana y mandó edificar iglesias.

En México es el día de la fiesta tradicional de los trabajadores de la construcción. Los albañiles acostumbran colocar, en lo alto de la fachada de la obra en construcción, una cruz de madera adornada con flores y papel de china, previamente bendecida por un sacerdote.

Esta tradición data de la época colonial a partir de la formación de los gremios y según viejas crónicas fue impulsada por Fray Pedro de Gante.

Esta celebración fue suprimida del calendario litúrgico por el papa Juan XXIII, pero los trabajadores de la construcción de México, siguieron manteniendo viva dicha tradición.

Dado el fervor religioso de los albañiles, el episcopado mexicano hizo gestiones para que en México continuara vigente la celebración de la Santa Cruz.