Encuentran ídolo maya y todos enferman extrañamente

Como una historia de película, la supuesta maldición atribuida a un muñeco de oro hallado en un cenote de la comisaría motuleña de Kiní estaría provocando enfermedades entre las personas que encontraron el objeto.
Se afirma que uno de los involucrados en el descubrimiento, todos ellos jóvenes, ya falleció a causa de una enfermedad de origen desconocido.
El muñeco de oro fue encontrado cuando los jóvenes limpiaban el cenote del rancho «Santa María».
Gente de la comunidad dice que esto provocó que las fuerzas ancestrales se desatarán, ya que cuatro de ellos se enfermaron y uno falleció hace unos días.
Aún permanecen hospitalizados en diferentes clínicas de Mérida los jóvenes Abraham Tamayo Canché, de 22 años; Gerónimo Pool Ciau y Javier Pool Pool, ambos de 18 años, quienes fueron contratados por Wilberth Tun Cab, quien también presenta los mismos síntomas que las personas ingresadas, pero en menor grado.
Este último fue quien se quedó con el muñeco, incluso se dijo que lo llevó a su domicilio ubicado al poniente de la comisaria, pero luego que sus compañeros se comenzaron a sentir mal quiso regresar el ídolo al cenote, aunque al ir a buscarlo ya no lo encontró, lo que avivó aún más la maldición contra los enfermos,.
Familiares de Wilberth Tun Cab dijeron que el hombre no quiere hablar del tema.
Otras personas indicaron que la gente del pueblo de Kiní está un poco asombrada con este caso del cenote en el rancho llamado «Santa María», ubicado en la carretera hacia Dzemul.
Arcadio Canché Pool, tío del joven Javier Pool, señaló que su pariente sigue ingresado, y lo extraño del caso es que tanto su sobrino como las personas que están hospitalizadas durante el día están bien, pero en las noches presentan dificultades para respirar.
«Ya contratamos a un curandero y se hizo una limpia, así como un cambio en la casa de mi sobrino, quien ya se está recuperando… todos coinciden que cuando limpiaban el cenote sacaron un bonito muñeco, como de oro, que se encontraba enterrado en ese lugar», relató Canché Pool.
Otras versiones indican que Wilberth Tun Cab, al encontrar el muñeco, lo ocultó con un block, y al acudir al otro día se dieron cuenta que había cambiado de lugar.
Lo encontraron en la pila de piedra dentro del cenote. No conforme con esto, lo agarró con intenciones que se desconocen y lo trajo hasta su domicilio.
«Dicen que desde que trajeron al muñeco, los demás trabajadores comenzaron a tener calentura y diversos síntomas por lo que tuvieron que ser ingresados, y lamentablemente falleció el pasado 24 de este mes Miguel Alejandro Dzul Ucán, de 22 años», comentaron las personas entrevistadas, que señalaron que si Wilberth tiene el muñeco es mejor que lo devuelva para que las personas se recuperen y no sigan «cargando ese mal aire del cenote».
El comisario Armando Cruz destacó que hay un poco de temor entre la gente, ya que a ciencia cierta no se sabe qué ocurrió en el cenote, ya que las personas involucradas siguen ingresadas, y otras más nunca dieron parte a las autoridades cuando empezaron a sentir los males.
«Dicen las personas antiguas de la comisaría que estuvo mal lo que hicieron, ya que primero tenían que pedir permiso a los ancestros que cuidaban ese cenote mediante un rezo y una recepción que debía efectuar un xamán o curandero», señaló el comisario Cruz.