Mauricio Vila supervisa mejoras en el rastro
El alcalde, Mauricio Vila Dosal, supervisó los trabajos de rehabilitación que se realizaron en diferentes áreas de Abastos de Mérida (Rastro Municipal) como parte de la innovación, mejora y eficiencia que realiza su operatividad ese centro, para mantener los mejores procesos de productividad en el Sureste.
En las instalaciones de la paramunicipal, Vila Dosal constató las mejoras que tuvieron una inversión aproximada de $1,401,000, que incluyó el mantenimiento de la estructura metálica existente en el sistema de rielería en la sala de matanza, así como la instalación y adecuación de circuitos eléctricos para la planta de emergencia y la rehabilitación del edificio frontal para las oficinas de cobranza y de atención al público.
Acompañaron al munícipe los secretarios de la sección general 152 y 43 del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria de la Carne, Similares y Conexos de la República Mexicana, José María Fernández Medina y Ricardo Herrera Solís, respectivamente.
Fernández Medina expresó al alcalde que el sistema de rieles debía de ser renovado desde hace 15 años y que en esta administración se resolvió en apenas seis meses.
En el recorrido por la línea de porcinos y ganado, Santiago Alamilla Bazán, director del Rastro Municipal, señaló que en estas áreas se dio mantenimiento a la estructura metálica del sistema de rielería en la sala de matanza, con una inversión aproximada fue de $740,000.
-La estructura que soporta todos los rieles y soportes de los equipos utilizados en el proceso de matanza del rastro se encontraban muy dañados y representaban un riesgo para la seguridad de los matarifes y trabajadores operativos- expuso.
El presidente municipal también verificó la instalación y adecuación de circuitos eléctricos para la planta de emergencia trabajos que en total requirieron una inversión de $544,000.
Alamilla Bazán expuso que no se contaba con planta de emergencia que garantice la salvedad de los canales que se encuentren en las cámaras de conservación al momento de alguna emergencia o desastre natural.
El alcalde también supervisó la rehabilitación de la oficina de cobranza (caja) y de la oficina de Atención al Público (Coordinación de Comercialización) en las que se invirtieron $117,000.
Al recibir el organismo en esta administración, el edificio frontal era utilizado como bodega de chatarra y basura. En administraciones anteriores funcionó como carnicería.
La mejora también incluyó la limpieza y el desmonte del terreno, y otras reformas varias en las instalaciones de las oficinas y anexos.
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