En un hecho bastante peculiar, las celdas de una localidad yucateca fueron insuficientes para alojar a varios de sus habitantes que se embriagaron para mitigar el calor y cometieron diversas faltas, mismas que amerita ron su arresto.

Fue tal la saturación de las cárceles, que se recurrió a una medida de excepción para que los detenidos no pasaran las 24 horas de arresto, a fin de liberarlos para dar cabida a otros ebrios.

y por si alguien dudaba que el calor tuvo que ver en esta situación, el propio director de la policía de la localidad confirmó el hecho, ocurrido en Hunucmá, ubicada a pocos kilómetros de Mérida y que será la cuna de la Cervecería Modelo, compañía que abrirá próximamente su fábrica en ese lugar.

En menos de 12 horas, los agentes municipales arrestaron a 15 personas por faltas derivadas del alto consumo de bebidas embriagantes, confirmó a un medio local el director de la Policía Municipal, Gonzalo Vera Sosa.

Precisó que los arrestos fueron por infracciones relacionadas con el consumo de alcohol, como dormir en la vía pública, causar riñas en su predio y con sus familiares
Generalmente se hacen uno, dos o tres detenciones de ebrios y hasta cinco los fines de semana, por lo que ahora la cifra se triplicó y trajo como consecuencia el hacinamiento de la cárcel municipal.

Para evitar pleitos entre los detenidos, se agilizaron los trámites y fue la jueza calificadora Guadalupe Chuc Xool la que determinó salidas alternas para castigar a los ebrios, algunos de los cuales si cumplieron las 24 horas en la cárcel municipal a cambio de no pagar la multa.

Otros salieron pagando entre l$200 y $250, siempre y cuando no existían denuncias penales o daño alguno.

En su mayoría, los detenidos eran jóvenes que aún viven con sus padres, por lo que fue notoria la presencia de éstos en la comandancia para pagar la multa o para llevar alimento al pariente detenido.

(foto de José Cob)