«No vayas, mi amor, te van a matar y no quiero perderte», le decía Margarita Flores Cetz a su marido mientra se colgaba de su ropa.

«Entra y acuéstate, por favor… sé que estás llevando la pistola, no hagas tonterías, no vayas», suplicaba.

Furioso por la actitud de su mujer, Gustavo de Jesús Cuxim Cuxim, pandillero de la Sur 13, la apartó de un fuerte empujón.

«Déjame, yo sé lo que hago, esos hijos de… tiene que pagar, hoy ya se los cargó la…», le respondió.

Al ver que la mujer insistía, sacó la pistola de entre sus ropas y le disparó en dos ocasiones.

Felipe Flores Chan, padre de Margarita y dueño del predio, salió alarmado a ver qué ocurría, y fue cuando encontró a su hija tirada y con heridas en el abdomen, la zona donde impactaron los dos balazos.

Frente a ella estaba parado Gustavo de Jesús, de 21 años, quien aún tenía la pistola en sus manos.

Al ver a su suegro escapó corriendo hacia la parte de atrás del predio. Ya para entonces alguien había llamado a la policía y a los servicios de emergencia, que en minutos llegaron y trasladaron a Margarita, de 28 años, gravemente herida al hospital O’Horán.

La joven estaba tratando de impedir que su marido, siete años menor que ella, fuera a enfrentarse a otros pandilleros, para lo cual estaba llevando su «fusca» (pistola) porque el pleito iba a ser a morir.

El violento hecho, como informamos, ocurrió la noche del domingo en los límites de Chuburná con la colonia Juan B. Sosa, en la calle 18 con 15.

Afortunadamente, cuentan los vecinos, la pareja no tiene hijos «porque si no estarían sufriendo».

Los jóvenes comenzaron a vivir junto hace poco tiempo y desde que llegó a la zona Gustavo de Jesús llamó la atención por su fomar de vestir y su aspecto «agresivo». Es de hablar poco y casi no convive con los vecinos.

El sujeto fue detenido en el mismo predio donde ocurrieron los hechos y ahí mismo se encontró la pistola oculta debajo de un pedazo de cartón.