Por considerar que su ex pareja no había recibido la dósis suficiente, tras ser liberado bajo medidas cautelares por acusación de violencia doméstica, Ángel Osvaldo Castro Pool volvió a darle otra tunda a la mujer.

Pese a que tenía la prohibición de acercarse o de comunicarse con la víctima por mensaje de texto, llamada o red social, y que tenía un localizador electrónico que alertaría de que incumpliera esto, el sujeto volvió a agredirla al toparse con ella «por casualidad».

En consecuencia, la juez Suemy del Rosario Lizama Sánchez le impuso ahora la medida cautelar de prisión preventiva por cuatro meses, los cuales vencen el 30 de septiembre.

El 31 de mayo pasado Castro Pool fue presentado ante la autoridad judicial por el delito de violencia doméstica, y en esa ocasión se le impusieron como medidas cautelares acudir a firmar una vez al mes durante los primeros cinco días, no salir de Yucatán, no convivir ni acercarse a la víctima en un radio de 300 metros; abstenerse de estar en el mismo lugar que ella y no comunicarse de ninguna manera con ella, además de colocarle el localizador electrónico.

Ahora por incumplir dos de esas medidas tendrá que seguir en prisión el proceso penal.

La víctima interpuso una nueva denuncia por lesiones que el imputado le causó el 23 de julio.

Sin embargo, la defensa del individuo mencionó que se encontró con ella “por casualidad”, pero no dio razones por las cuales el localizador electrónico no funcionó.

Los hechos iniciales ocurrieron el pasado 28 de mayo, aproximadamente las 22:30 horas, cuando la víctima Jessica Nayeli de la Cruz Guzmán estaba en un domicilio del fraccionamiento Jardines del Norte con el agresor, con quien en ese momento mantenía una relación sentimental.

En un momento dado, el sujeto la agredió físicamente y le causó lesiones que tardaron más de 15 días en sanar.