Bebió hasta que la muerte lo recogió en su seno

Pese a que ya le habían prohibido tomar porque tenía cirrosis, Gílmer René Quijano Moguel alias «La Rana», de 48 años de edad, nunca quiso soltar la botella.

Precisamente su férrea afición a la bebida lo llevó a la muerte en su predio ubicado en la calle 91 entre 62 y 62-A.

Apenas 15 días atrás fue salvado de morir luego de sufrir una crisis por la cirrosis hepática. En esa ocasión se quedó tirado a las puertas de una tienda, con los pies hinchados y respirando con dificultad.

Vecinos llamaron a paramédicos de la SSP y se le trasladó al hospital O’Horán, donde no aguantó y salió por voluntad propia para dirigirse a su casa, donde vivía solo, ya que su familia lo abandonó por su afición a la bebida.

El sábado por la noche se sintió mal y de nuevo los vecinos llamaron a una ambulancia, pero Gilmer René se negó a ir al hospital. Horas después murió en su vivienda.