El Tribunal Primero de Enjuiciamiento sentenció a solo 11 años de prisión a Santiago Cruz Cimé Chan, (a) “El Tuto”, quien asesinó a su compañero de parranda la Navidad de 2015, en Dzilam González.
El Tribunal determinó que las pruebas aportadas por la parte acusadora fueron idóneas, pese a que el acusado siempre alegó inocencia.
Aún así, la sentencia fue baja, de hecho es la segunda más baja que se pone por homicidio en la entidad desde que funcionan los juicios orales.

Ello se debió a que los fiscales no acreditaron la calificativa de la ventaja, ya que no advirtió la superioridad del indiciado en los datos de prueba y lo manifestado por los testigos no fue debatido por la citada autoridad.
El juez Níger Desiderio Pool Cab, quien fungió como relator en este juicio, leyó la sentencia a la que el Tribunal acordó por unanimidad de votos, en la cual se le impuso también al imputado el pago de la reparación del daño emergente y daño moral por la cantidad total de 1,369,963.80 pesos.
También se ordenó su amonestación, la suspensión de sus derechos políticos y cuando la sentencia quede firme, será puesto a disposición del juez de ejecución de sanciones del Poder judicial del Estado, que se encargará del cabal cumplimiento de la misma.
Por último, la jueza presidenta, Nidia Guadalupe Celis Fuentes, dio el martillazo final con lo que cerró la audiencia de juicio oral y se dio por concluido este caso.
Los hechos ocurrieron el día 25 de diciembre de 2015, aproximadamente a las 07:30 horas, cuando el ahora sentenciado, con un cuello de botella, mató a Nífer Puc Couoh, en una cancha de la colonia Taiwan, en Dzilam González.
Al calor de las copas surgió una discusión que terminó en un enfrentamiento a golpes.

En un momento dado Cimé Chan, con una botella rota, le propinó un tajo en la garganta a Puc Couoh, quien por la hemorragia, que no se pudo contener, falleció.

La denuncia del homicidio la presentó ante la autoridad investigadora Nifer Puc y Aldecua, por la muerte de su hijo Nifer Puc Couoh, (a) “Lucha”,