Decían que era bruja y murió como los santos, en el sur de Mérida

El cuerpo momificado de una mujer, de unos 75 años de edad, fue haladdo esta mañana en el predio número 352 de la calle 26 entre 81 y 83 de la colonia Vicente Solís, luego que no se le viera y extrañara por casi un año.

La mujer, a la que por el rumbo se le conocía como «La Bruja», se encontraba perturbada de sus facultades mentales y tenía la fama de matar gatos, a los cuales siempre recogía en las calles y mantenía en su vivienda.

Fue identificada por una sobrina, de nombre Socorro Quijano Puerto. En vida se llamó María Elena Gómez Magaña y vivía sola.

Por alguna extraña circunstancia, sus restos se secaron y momificaron, como le ha ocurrido a varias personas que han sido beatificadas y/o canonizadas por la iglesia católica, es decir, que se convirtieron en santos.

Hasta el momento no se sabe la causa de muerte de María Elena. En el sitio no hay huellas de violencia o de algún acto delictivo.

Entre los vecinos se supo que padecía de sus facultades mentales y no era muy sociable y se caracterizaba por ser muy agresiva, por lo que vivía en forma apartada.