Pese a la intermediación de su madre, este viernes se determinó que Guillermo José Molina Canto tendrá que enfrentar los cargos por la presunta agresión a su mujer.

La juez de control Elsy del Carmen Villanueva Segura no exoneró al sujeto y, por el contrario, le amplió las medidas cautelares dictadas en días pasados por la Fiscalía.

Durante un mes, no podrá acercarse o comunicarse con la víctima; de hecho, no podrá estar en un radio de 20 metros a la redonda, incluso tampoco cerca del centro de trabajo de su mujer.

Además, se le advirtió que deberá abstenerse de realizar conductas de intimidación o molestia hacia la víctima y personas relacionadas con ella.

Dichas medidas se ratificaron por 30 días, a partir del 11 de julio.

La juez incluso ordenó que la menor hija de la pareja debe tener asistencia legal especializada en derechos de la infancia.

Este viernes, Guillermo José Molina Canto acudió al Centro de Justicia Oral de Mérida para tomar parte en la audiencia de ratificación de medidas cautelares en su contra por el delito de violencia familiar.

Como informamos, se le sigue proceso por la denuncia que interpuso en su contra su pareja Lissie Rossana Sánchez Castro.

La madre del sujeto, Ligia Canto Lugo, defensora de los derechos de las mujeres maltratadas y madre de la fallecida Emma Gabriela Molina Canto, estuvo presente desde temprana hora en el edificio sede del tribunal, pero se retiró después.

También acudió la víctima directa y el imputado contó con la defensa de su hermano Carlos y del abogado Efraín Encalada Burgos.

Guillermo José seguirá libre el proceso, iniciado el domingo pasado, cuando presuntamente agredió a su pareja dos veces un mismo día.

Como ella no presentó huellas visibles de golpes, el asegura que no la agredió, aunque para la ley los jaloneos, empujones y zamarreadas si constituyen una agresión física.