Un niño que sufría constantemente violencia de parte de su padrastro, decidió ir a pedir ayuda a la Policía Municipal de Ucú, lo que permitió se detuviera al agresor y fuera puesto a disposición de las autoridades.

Ahora, Limberth Amézquita Morales enferentará proceso penal por los delitos de violencia familiar equiparada y lesiones, que le imputa la representación social por conducto de José Angel Concha Martínez, representante legal de la Procuraduría del Menor y la Familia.

El juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero lo vinculó y le impuso prisión preventiva por dos meses y fijó el cierre de investigación en un mes.

Segün el expediente, el 5 de julio, aproximadamente a las 11 de la noche, El Niño se encontraba en la puerta de su domicilio, en la calle 12 entre 25 y 27 de Ucú, donde cohabita con sus hermanos, el imputado y su madre.

Sin motivo alguno Limberth le dio una bofetada y posteriormente le tiró una piedra, ocasionándole al menor lesiones en la cara y brazo, mismas que no ponen en peligro la vida y tardan en sanar menos de 15 días.

El menor, harto de la situación, corrió a la comandancia de la policía municipal a pedir ayuda, señalando a su vez que no es la primera vez que lo golpea y que es la tercera ocasión que ha tenido que acudir a pedir auxilio.