Detenido dice que atacó a un ex diputado porque lo humilló delante de sus amigas
Este día, Miguel Angel Gómez Camargo fue enviado al penal acusado de lesionar con un arma blanca a su primo el ex diputado panista Jimmy Yamil Ambrosio Camargo.
El sujeto guardó silencio sobre los hechos, aunque en el Ministerio Público dijo que atacó a su pariente porque éste lo humilló delante de dos amigas suyas.
Gómez Camargo, apodado Barnie” o “Diablo” fue remitido al Juzgado Segundo Penal, acusado de los delitos de tentativa de homicidio calificado, robo y ataques peligrosos, denunciados por el ex legislador y su madre, Hilda Camargo Chac.
Al ser puesto ante el juez de la causa, el agresor no quiso responder a la acusación y prefirió guardar silencio, aunque en el expediente consta que en el Ministerio Público dijo que el miércoles pasado tomó las cervezas con un amigo suyo al que conoce solo como “Mijail”.
También fue con otro amigo apodado “Shadow”, en cuyo domicilio se tomó 15 caguamas en compañía de este sujeto y otros cinco cuates.
Ya en la noche, se fue a casa de su mamá, donde se bañó y se cambió de ropa y de nuevo se fue a la calle.
Luego fue al parque de la colonia Vicente Solís y estuvo con sus amigas Ana Karen y Pamela.
A ese lugar se presentó en una motocicleta el ex diputado y le dijo que ya no fuera a su casa porque era un ladrón y que anduviera con cuidado.
Aseguró que el ex diputado se sacó el cinturón y lo golpeó con la hebilla, aunque él no se defendió.
Más tarde, al pasar por la casa de la madre del ex diputado, éste lo amenazó de nuevo con un pedazo de madera.
Esto lo enfureció y decidió cobrar venganza, pues había sido humillado delante de sus amigas.
Entonces, se dirigió a su casa, tomó un picahielos y regresó a la casa de su tía, donde enfrentó a su primo y lo hirió en varias ocasiones.
Dijo que el ex diputado no se amedrentó y se defendió, por lo que decidió seguir clavándole el picahielos.
Luego huyó, pero fue detenido cuando se escondía en el ropero de la casa de su mamá.
“Barnie”, de 20 años de edad, dijo ante el Ministerio Público que estaba drogado cuando cometió el ataque y por eso no pensó bien lo que hacía, aunque ante el juez decidió guardar silencio.
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