A fin de garantizar que se quede en prisión, la Fiscalía estatal tendrá que presentar un estudio psicológico del feminicida Eduardo Enrique Real Castillo, procesado por matar a su ex pareja en Plaza Fiesta.

El estudio servirá para confrontarlo con el que le practicó el psiquiatra del penal, Arsenio Rosado Franco, quien determinó que tiene problemas mentales, lo que lo haría candidato a no quedarse preso y a ca,vio ser enviado al Psiquiátrico o a otro lugar especial.

Será el juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero, después de valorar los argumentos y pruebas de las partes, quien determinará lo que se habrá de hacer con Real Castillo, pero el juzgador la tendrá más fácil si la Fiscalía no confronta los resultados hasta ahora practicados a solicitud de la defensa del sujeto.

Como informamos, anteayer el procesado fue llevado al Centro Médico de las Américas, pues se le practicó un “mapeo cerebral”, ya que su defensa busca establecer que presenta un daño orgánico en el cerebro, que lo hace padecer un retraso mental y problemas psicológicos.

Con ello, el sujeto podría ser declarado inimiputable, con lo que, por ley, se le deberá confinar en un lugar distinto a la cárcel

La Fiscalía aún tiene oportunidad de aportar pruebas que demuestren que pese a sus problemas mentales, el sujeto puede cumplir condena en el reclusorio meridano y a la vez recibir tratamiento para sus problemas mentales.

A toda costa, la Fiscalía buscará que el sujeto sí sea condenado por matar a cuchillazos a su esposa Jessica Esmeralda Cano Baas, con quien procreó a 3 hijos.

Pasado mañana viernes, también en el CMA, en el mismo nosocomio, se le realizará un segundo encefalograma para determinar por completo el daño orgánico.

En días pasados, como informamos, el psiquiatra del penal, Arsenio Rosado Franco, igualmente emitió un dictamen en el que reitera que el presunto feminicida tiene retraso mental.

Los hechos por los que se le acusan, como es sabido, ocurrieron el 23 de junio pasado, aproximadamente a las cuatro de la tarde, cuando el imputado fue a Plaza Fiesta, donde se encontró con su mujer, de la que estaba separado, y después de intercambiar palabras, él sacó un cuchillo que llevaba en varias prendas de vestir contenidas en una bolsa de plástico, y se abalanzó contra Jessica Esmerada, a quien le lanzó varios tajos, causándole la muerte.