Como sucede en muchos de los casos de agresión contra mujeres, este día una joven madre meridana acudió ante la juez a pedir que dejen libre al hombre que le puso tremenda golpiza la semana pasada.

El es el mismo al que encarcelaron gracias a que la pequeña hija de la mujer tomó el celular de la madre y marcó al 911 para pedir auxilio cuando la mujer era agredida pese a que está embarazada.

Hoy, la afectada, Clarisa de los Angeles Osorio, acudió ante la juez de control Suemy del Rosario Lizama Sánchez para otorgar perdón a su pareja, Israel del Río Camargo, quien permanecía preso por el delito de violencia familiar.

En la audiencia, la mujer que no deseaba más que Del Río Camargo estuviera preso, a lo que la Fiscalía se opuso, pero la juez autorizó conceder la libertad condicional, aunque el proceso continuará y la investigación complementaria se efectuará en dos meses.

La juzgadora ordenó que el agresor se presente periódicamente ante el Centro Estatal de Medidas Cautelares, no salga del Estado, no se acerque a la víctima e hija’ por ende separación del domicilio que habita la víctima, y portar localizador electrónico, por todo lo que dure el proceso.

En la denuncia, como informamos, se indica que el 19 de agosto, el sujeto ejerció actos de violencia física y moral contra la mujer, quien se encuentra embarazada.

Ese día la insultó y quiso tener relaciones sexuales, a sabiendas de que el embarazo de ella es considerado de riesgo.

Al al negarse la víctima, el imputado se molestó y empezó a aventar cosas de la casa.

Al amanecer del día siguiente, el sujeto continuó insultando a la agraviada; la abofeteó y golpeó en la espalda, ocasionando que cayera al suelo, donde la siguió atacando.

Le puso la rodilla encima de su cuerpo e intentó asfixiarla, pese a que era observado por la hija menor de ambos, a quien la mujer logró entregarle su celular para que llamara a la policía.

La niña recordó las enseñanzas de su madre y marcó al 911, salvando así a su mamá de morir a manos del energúmeno sujeto.