Revelan episodios de lujuria, alcohol, sexo y homosexualismo en un crimen

Al rendir declaración preparatoria, los cuatro detenidos por el crimen del estadounidense homosexual Leo Robert Wicard, negaron los hechos.
Los cuatro culparon del crimen a Angel Javier Segovia, quien  se encuentra prófugo, aunque todos dijeron que no vieron cómo murió el extranjero.
Durante las diligencias, los detenidos solo aceptaron el robo de las pertenencias del extranjero, a quien se halló semienterrado en su casa de San Sebastián, en la calle 78 entre 73 y 75.
En el expediente se describen episodios de lujuria, homosexualismo, drogas, alcohol y muerte, pues los cuatro detenidos, el prófugo y el muerto realizaban fiestas subidas de tono en esa casa.
Los  testimonios de los cuatro fue recibido en el  Juzgado Séptimo Penal,
El capitalino David Wilfrido Pérez Morán (a) “Niñote”, de 26 años, dijo que solo estuvo viviendo algunos días en casas del extranjero, pero no vio nada malo.
Dijo que en abril llegó a Mérida en compañía de Angel Javier Segovia Domínguez, porque pensaba estudiar gastronomía, aunque no lo hizo  .
Un día, acudieron al Bar Imperial y conocieron a los otros tres implicados.
Dijo que Martín Alejandro Gómez Gómez (a) “Gary”, de 26 años de edad, los llevó a vivir a casa del gringo porque éste era su amante.
Gianni Lorenzo Matos Montalvo (a) “Enzo”, de 18 años, también se fue a vivir con ellos
Por su parte, Edward Jesús Gamboa Salas, de 36 años, dijo que él solo fue a tomar cervezas a la casa del gringo.
Dijo que los otros sujetos le dijeron que se llevarían las cosas porque la dueña de la casa los estaba sacando, ya que el extranjero se había regresado a Indianápolis.
Al  cargar las cosas, fueron detenidos por agentes de la SSP, aunque él
l desconocía que había muerto el extranjero.
“Enzo” dijo que si le pareció extraño no haber visto al gringo, pero solo aceptó su participación en el robo..
“Gary”, por su parte,  dijo que se volvió amante del prófugo y autor material del crimen y que éste lo convenció de robarle a “Leo”.
El expediente indica que “Enzo” y Edward estaban de acuerdo en el atraco, pero Javier Segovia reacciono violentamente y asesinó al extranjero apuñalándolo.
El mismo sujeto prófugo fue quien enterró el cuerpo en la casa, usando cemento, cal y unos blockes.
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