El taquero Miguel Angel Góngora Zapata fue presentado ante un juez por haber dejado a sus hijos sin manutención.

Enfrenta proceso penal por el delito de incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar, pero el que el juez primero de control, Kenny Martíns Burgos Salazar, decidió no dejarlo preso y a cambio le impuso la medida cautelar de firmar los primeros cinco días de mes; depositar una garantía económica de 3 mil pesos, y no salir del Estado.

La denuncia en su contra fue interpuesta por Elsi de Guadalupe Mex Chi en agravio de sus dos hijos menores de edad.

En la carpeta de investigación obra que la pareja vivió en unión libre y procrearon dos hijos, pero al separarse acordaron que Góngora Zapata le daría a la denunciante, como pensión para sus hijos, 100 cien pesos diarios.

Acordaron que la mujer acudiría a buscar el dinero en el centro de trabajo del sujeto, es decir a una taquería del mercado San Benito.

Sin embargo, él no cumplió con su obligación de forma injustificada, pues cuando la denunciante acudía para recibir el dinero, se negaba a dárselo o se escondía de ella.

A la mujer no le quedó más que vender ropa en los tianguis para poder obtener recursos para mantener a los hijos de ambos.