El Ayuntamiento de Mérida clausuró la antigua cantina «El Chembech», ubicada en el barrio del mismo nombre.

La clausura fue por violación al reglamento to de construcción, al parecer a modificaciones que se hicieron sin autorización, sin descartar que la Comuna haya procedido para evitar un accidente similar al ocurrido en Progreso en la cantina «Mocambo», donde hubo un derrumbe mortal tras remodelaciones que se hicieron al local.

Llama la atención el tamaño y la gran cantidad de sellos que se colocaron en la clausura, pues prácticamente todo el frente del bar quedó tapizado, advirtiéndose en los documentos que se procederá contra los responsables en caso de que se quebranten los sellos.

Está es la segunda clausura de esa cantina en los últimos meses, pues en el último tercio de 2018 la CFE suspendió el servicio porque presuntamente el negocio usaba «diablito».

El bar, ubicado en la calle 42-A entre 57 y 55, es muy antiguo, incluso ha tenido varios nombres, entre ellos «El Nido» y «El Nido del Bech».

Sin embargo, se hizo famoso el año pasado, no solo por su remodelación, sino por un detalle en los baños.

Y es que los nuevos administradores, de origen irlandés, decidieron colocar fotografías del presidente estadounidense Donald Trump para que los clientes le ‘disparen’ en el rostro cuando usen el baño.

Hay varias fotografías y están colocadas de tal forma que los que usen el baño, quieran o no, tienen que orinar al mandatario estadounidense.

Los meseros y los propios ‘barmans’ invitan a ir a ‘atinarle’ al presidente estadounidense, incluso los parroquianos usan la frase ‘voy a tirarle a Donald Trump’ cuando quieren referirse a que van al baño.