Una mujer llamada Jacqueline Ades, que el año pasado fue encarcelada por enviar 159.000 mensajes de texto a un hombre y haber irrumpido en su casa en Arizona (EE.UU.), quiere que se reabra el caso porque está convencida de que será declarada inocente y el juez les ordenará a ella y al varón que se casen, informó este viernes USA Today.

«No puedo creer que realmente esté en la cárcel por algunos mensajes de texto», dijo Ades durante una entrevista telefónica desde el centro penitenciario donde cumple condena. «Sencillamente, creo que es ridículo», añadió la mujer.

Según el medio estadounidense, después de tener una cita, Ades se pasó diez meses acosando a la víctima mediante mensajes de texto, llegando incluso a amenazarlo con devorar sus órganos.

No obstante, ella asegura que se trataba tan solo de una broma y que jamás actuaría así.