Por considerar que no tuvo intenciones de matar, un meridano de 35 años enfrentará cargos «más suaves» por la muerte de  su rival de amores. 

El acusado Ángel E. Z. será juzgado por homicidio simple y no por homicidio calificado, esto luego de que el juez Antonio Bonilla Castañeda reclasificara el delito por el que el sujeto fue acusado inicialmente. 

Y es que la diferencia entre ambos delitos es sustancial, toda vez que por homicidio calificado la pena se sitúa entre los 20 y los 30 años, mientras que el homicidio simple se sanciona con 10 a 15 años de cárcel. 

Los hechos ocurrieron el 14 de febrero en el fraccionamiento Tixcacal Opichen, cuando Guillermo Nadal, e 68 años, de partía con una mujer mucho más joven y llegó Ángel, presunta pareja de la dama. 

Los hombres discutieron y Ángel decidió llevarse a la mujer, pero cuando ya estaban en el auto, el ahora occiso quiso abrir la portezuela y al no lograrlo, le dio un puñetazo a la Ventanilla. 

Esto enojo mucho a Angel, quien bajó y le dio una patada en rostro al sexagenario, quien cayó de espalda y se golpeó fuertemente la cabeza, falleciendo horas después en el hospital por traumatismo craneoncefalico. 

El atacante fue detenido, lo mismo que la mujer por oponerse a la detención del primero, aunque ella fue liberada después.