En una muestra de la peligrosidad en que se convierten las bombitas, petardos y juegos pirotécnicos de la época , ayer una persona con problemas mentales provocó el incendiod e su casa al reventar palomas en Tizimín.

Los bomberos acudieron al sitio, pero poco pudieorn hacer por salvar la casa, ubicada en la calle 16 de la colonia Komichén.

Se informó que Severiano Abán Cupul, de 25 años de edad, comenzó a reventar bombitas, pero una de las chispas alcanzó el incendio de la casa de huano y tablones.

Las llamas alcanzaron más de ocho metros de altura y amenazaron otras viviendas, pero la oportuna intervención de los bomberos evitó la tragdia.

En la casa se quemaron cobertores, ropa, hamacas, sillas y zapatos, aunque se logró salvar un librero, una relevisión, un modular.