Ocurrió a las puertas del Cedis de Dunosusa en Kanasín, donde un joven de la comunidad LGBT se presentó a reclamarle al gerente porque supuestamente es su pareja sentimental.

Como si de marido y mujer se tratara, el reclamante, quien dijo que se llama Tábata, comenzó a ventilar cosas de la intimidad, incluso pidió que le dijeran al gerente que él no es un «juguete sexual» que usa y luego deja.

Los vigilantes le pidieron en reiteradas ocasiones que se retire, pero el despechado joven no se fue sin antes leerle al gerente toda la cartilla. Le dijo que era un maldito, imbécil y estúpido, además de un «mayate asqueroso» y muchas otras cosas más.

Al parecer, los hechos ocurrieron en el reciente 14 de febrero, Día del Amor y la Amistad, pues el amante llevaba una rosa para entregársela a su hombre, pero la flor terminó despedazada en el piso luego de que los vigilantes invitaron al despechado a que se retire.

Se desconoce si fue algo real o si se trató de algún reto de redes sociales, pues originalmente el video de publicó en la cuenta El Titireto Kanasín.

Como sea, ahora ya se sabe que el gerente del Cedis de Dunosusa tiene un amor de contrabando, pero que no quiere que sea amor de una sola ocasión.