Fallece conocida meridana, dueña de la casa más famosa de la ciudad
MÉRIDA.- Anoche falleció un icono de la cultura popular en Mérida: la señora Míriam Echeverría y Boldo, quien era ampliamente conocida por su casa estilo chino en la colonia México, pero también por un sobrenombre producto de la envidia por su belleza y distinción.
La 500 le decían quienes la señalaban de ser una mujer interesada, que cobraba 500 pesos por su compañía. Esas malas lenguas reconocían que era una mujer bella, de escultural cuerpo, blanca y alta de cabellera negra. Murmuraban los mal intencionados que solo llegaban clientes potentados, puros empresarios de mucho dinero, solo se relacionaba con caballeros de la alta esfera de la sociedad.
Quienes la conocieron de cerca sabían que fue una mujer adelantada a su época, que no vivió conforme a los estereotipos de sus contemporáneos. Era una mujer culta, inteligente y ambiciosa, que amaba la arquitectura e historia medieval china.
Al ser una mujer atractiva, tuvo muchos pretendientes. Sin embargo, ella solo tenía ojos para un hombre que desafortunadamente era casado, con quien mantuvo una relación de muchos años. Él después de enviudar decide casarse con ella, lo cual causó muchas habladurías y envidias.
El matrimonio no duró mucho y se divorciaron con el acuerdo de que el ex marido le construiría una casa china, que se convirtió en la envidia de los detractores de Míriam, y con los años en una referencia de la ciudad.
La señora Echeverría y Boldo fue dueña del conocido restaurante bar El Guacamayo, en la calle 60, rumbo al estadio Salvador Alvarado.
Falleció a la medianoche del domingo. Descanse en paz.
Comentarios recientes