Caen cuatro ratas tapatías
Unas ratas tapatías que intentaron hacer de las suyas en Mérida fueron detenidas cuando saqueaban una casa de la colonia Xoclán-Susulá.
Robaron para conseguir dinero para regresar a pasarla bien a Cancún, donde también han cometido sus fechorías.
Los detenidos son Luis Eduardo Arévalo Lópe, de 41 años de edad, Carlos Robles Contreras, de 50 años, Cristina Mendoza Cerna, de 34 años, y María Silvia Aguirre Torres, de 44 años.
Ellos se pusieron de acuerdo y entraron a robar en un predio de esa colonia, pero fueron detenidos por la Policía Judicial tras ser descubiertos saliendo del inmueble.
Los cuatro amigos de lo ajeno son originarios de Guadalajara Jalisco y llegaron a la ciudad de Mérida procedentes de Cancún, Quintana Roo, sitio al que ya no pudieron retornar al acabárseles el dinero, decidieron conseguir más, robando objetos de valor de algún domicilio y así poder retornar al vecino estado.
El cuarteto de amigos de lo ajeno fue descubierto cuando agentes de la Policía Judicial realizaba labores de investigación en la colonia Susulá Xoclán y al estar transitando sobre la calle 71 por 134, se percataron que del predio No. 1091 salió un vehículo Ford, tipo Fiesta, con placas de circulación JHJ-3356 del estado de Jalisco, así como un hombre y una mujer, quienes actuaban de manera nerviosa y quienes se retiraron del lugar caminando.
Al Percatarse que la puerta del domicilio se quedó abierta, los agentes procedieron a dar alcance al automóvil antes referido, pero el conductor intentó darse a la fuga, por lo que el vehículo judicial les cerró el paso y logró interceptarlo. El automotor, en cuyo interior podían apreciarse diversos artículos electrónicos, era conducido por un sujeto que se identificó como Luis Eduardo López Arévalo, quien estaba acompañado de Cristina Mendoza Cerna.
Al ser cuestionados sobre su sospechoso comportamiento, los ocupantes del vehículo reconocieron que momentos antes se habían introducido a robar al predio de donde se les había visto salir y que las personas que se retiraron caminando responden a los nombres de Carlos Robles Contreras y María Silvia Aguirre Torres, quienes también iban con ellos y eran sus cómplices, pero estos se dirigían a tomar un taxi que los llevara al centro de la ciudad, en donde se reunirían para vender los objetos robados.
Con el apoyo de otras unidades policíacas, se logró interceptar a esta última pareja aproximadamente a seis cuadras del lugar, por lo que junto con los otros inculpados fueron detenidos y remitidos al edificio de la policía judicial, ocupándoles el vehículo que utilizaron para cometer el hurto, así como dos televisores, un modular, un DVD y una computadora, los cuales fueron sustraídos del predio.
Para llevar a cabo el robo, los amigos de lo ajeno se cercioraron que no hubiese morador alguno en el inmueble y para ello la inculpada Mendoza Cerna se aproximó a la puerta y comenzó a llamar sin recibir respuesta alguna, por lo que sus cómplices descendieron del vehículo y forzaron la cerradura con un pedazo de tubo galvanizado para introducirse a la propiedad, en donde se apoderaron de los artículos, mientras las mujeres se quedaron vigilando en la puerta.
Asimismo, al continuar con las indagatorias, Robles Contreras indicó que pese a que habían cometido el hurto, no se dedicaban al robo en casas habitación, ya que por lo general se dedicaban a timar a las personas en las puertas de los bancos con el cuento del paquete de billetes, o simplemente elegían a personas de avanzada edad para amenazarlas y robarles dinero, como la que realizaron el pasado 14 de mayo en la tienda Wal-Mart de paseo Montejo.
Los cuatro amigos de lo ajeno son originarios de Guadalajara Jalisco y llegaron a la ciudad de Mérida procedentes de Cancún, Quintana Roo, sitio al que ya no pudieron retornar al acabárseles el dinero, decidieron conseguir más, robando objetos de valor de algún domicilio y así poder retornar al vecino estado.
El cuarteto de amigos de lo ajeno fue descubierto cuando agentes de la Policía Judicial realizaba labores de investigación en la colonia Susulá Xoclán y al estar transitando sobre la calle 71 por 134, se percataron que del predio No. 1091 salió un vehículo Ford, tipo Fiesta, con placas de circulación JHJ-3356 del estado de Jalisco, así como un hombre y una mujer, quienes actuaban de manera nerviosa y quienes se retiraron del lugar caminando.
Al Percatarse que la puerta del domicilio se quedó abierta, los agentes procedieron a dar alcance al automóvil antes referido, pero el conductor intentó darse a la fuga, por lo que el vehículo judicial les cerró el paso y logró interceptarlo. El automotor, en cuyo interior podían apreciarse diversos artículos electrónicos, era conducido por un sujeto que se identificó como Luis Eduardo López Arévalo, quien estaba acompañado de Cristina Mendoza Cerna.
Al ser cuestionados sobre su sospechoso comportamiento, los ocupantes del vehículo reconocieron que momentos antes se habían introducido a robar al predio de donde se les había visto salir y que las personas que se retiraron caminando responden a los nombres de Carlos Robles Contreras y María Silvia Aguirre Torres, quienes también iban con ellos y eran sus cómplices, pero estos se dirigían a tomar un taxi que los llevara al centro de la ciudad, en donde se reunirían para vender los objetos robados.
Con el apoyo de otras unidades policíacas, se logró interceptar a esta última pareja aproximadamente a seis cuadras del lugar, por lo que junto con los otros inculpados fueron detenidos y remitidos al edificio de la policía judicial, ocupándoles el vehículo que utilizaron para cometer el hurto, así como dos televisores, un modular, un DVD y una computadora, los cuales fueron sustraídos del predio.
Para llevar a cabo el robo, los amigos de lo ajeno se cercioraron que no hubiese morador alguno en el inmueble y para ello la inculpada Mendoza Cerna se aproximó a la puerta y comenzó a llamar sin recibir respuesta alguna, por lo que sus cómplices descendieron del vehículo y forzaron la cerradura con un pedazo de tubo galvanizado para introducirse a la propiedad, en donde se apoderaron de los artículos, mientras las mujeres se quedaron vigilando en la puerta.
Asimismo, al continuar con las indagatorias, Robles Contreras indicó que pese a que habían cometido el hurto, no se dedicaban al robo en casas habitación, ya que por lo general se dedicaban a timar a las personas en las puertas de los bancos con el cuento del paquete de billetes, o simplemente elegían a personas de avanzada edad para amenazarlas y robarles dinero, como la que realizaron el pasado 14 de mayo en la tienda Wal-Mart de paseo Montejo.
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