Con todo y su Sendero Jurásico, Progreso es renombrado «Capital de la Hortaliza»

PROGRESO.- Ante el incumplimiento del alcalde Julián Zacarías Curi de la promesa de mejorar un parque para vecinos del centro del puerto, los ciudadanos decidieron hacer una peculiar protesta.

El parque que Zacarías Curi ofreció remodelar hace tres años se ubica en la calle 39 entre 82 y 84.

Los vecinos se sienten desatendidos por las autoridades municipales, y reclamaron que el alcalde Julián Zacarías esté más preocupado por obras que «aumentan su popularidad», pero no se enfoca en obras que realmente necesita la gente.

Vía redes sociales los ciudadanos anunciaron la «inauguración» del parque, con «atracciones» que evidencian las múltiples carencias.

Incluso mencionan que estará en la «inauguración» el cantante «Luis Miguel», en alusión al anuncio que hizo Julián Zacarías de que estaría en el puerto el famoso hijo de Luisito Rey, aunque todo se trató de un concierto del programa Noches de Música en el Muelle, donde el cantante yucateco Javier Alcalá rindió un tributo a Luis Miguel.

En una de las fotos, que se comparten en la cuenta de Gandy Novelo, se ve un arco de bienvenida a Progreso con la leyenda: «capital de la hortaliza».

En otras imágenes se ve a niños del rumbo jugando en charcos, yerba y deterioradas instalaciones que forman parte de las «atracciones» del parque, que contrastan con el Sendero Jurásico que en breve inaugurará el presidente municipal.

También se ven baches, calles en pésimo estado y en general una deprimente imagen urbana que contrasta con las obras que presume Zacarías Curi, quien por cierto estuvo en Miami, en una reunión de operadores de cruceros turísticos.

A los directivos de las grandes navieras no les gustaría enterarse de la tremenda desigualdad que hay entre la zona turística de Progreso y las condiciones en las que vive la gente.

Y esta desigualdad no se debe a la falta de derrama económica, que bastante dejan los cruceros y otro tipo de turismo en Progreso, sino por la mala administración de los recursos por parte de un presidente municipal más preocupado en su siguiente escalón político que en las necesidades de su gente, a la que considera mediocre y sin ganas de superarse.