En el oriente de Yucatán se reportó la muerte de dos personas, y en ambos casos fueron los vecinos los que encontraron los cadáveres.
Uno de los casos ocurrió en Tizimín, donde fue encontrado el cadáver de un hombre de aproximadamente 80 años macheteado y con un fuerte golpe en la cabeza, producido por el impacto de una piedra de gran tamaño.
En el otro caso se trata de la muerte del conocido comerciante de Espita José «Pepe» Bates, de aproximadamente 70 años, quien encontrado muerto en su casa. Al parecer, tenía varios días de haber fallecido porque el cuerpo estaba en avanzado estado de descomposición.
Respecto al caso del sexagenario, fue identificado como José María Canché Be, quien murió defendiendo su terreno de la intromisión de un extraño.
Según se averiguó, durante la noche el anciano escuchó ruidos en su terreno y salió armado con un machete al enfrentar al invasor.
Sin embargo, el desconocido le arrebató el machete y con el mismo le propinó certeros tajos en las manos. Para rematarlo, el individuo le asentó en el cráneo una piedra de gran tamaño.
El cuerpo fue encontrado horas después y causó consternación entre vecinos de Tizimín por la forma en que murió don José María.
Sobre el caso de Espita, se informó que se trata del conocido empresario José «Pepe» Bates, quien habría muerto ejecutado al estilo narco en su vivienda de la calle 27 entre 24-A y 26, donde fue encontrado su cuerpo en estado de descomposición.
Tras el hallazgo, se avisó a las autoridades que constataron el macabro descubrimiento y se procedió a las diligencias legales.
Una versión indica que fue encontrado en el baño de la casa, donde estaba atado de manos y pies, y además colgado de las piernas en algún objeto del techo y, aparentemente, degollado.
«Pepe» Bates era empresario del ramo hotelero en la villa de Espita.