MÉRIDA.- Apenas la semana pasada el cubano Yamil Marfil llevaba vida de casado en Chetumal, la capital del vecino estado de Quintana Roo, con su esposa Julika Novelo Castro, a quien le dijo que saldría de viaje, pero en realidad el sujeto fue a casarse con otra chetumaleña, en Tekax, en el sur de Yucatán.

Las fotos del bígamo fueron descubiertas gracias a una publicación de sociales en un periódico local, donde se ve al cubano en una sesión de fotos con su nueva esposa, Victoria Cabrera.

Enterada de lo sucedido, Julika no dudó en exhibir al cubano, quien era un músico desempleado cuando lo conoció. Sin embargo, poco a poco fue descubriendo que a su marido le gustaba vivir de apariencias y de engaños.

A continuación lo que publicó en redes tras enterarse del delito de bigamia del cubano, quien fue a casarse a otro estado para que no descubrieran la ilegalidad:

-Leo este circo y comprendo la enfermedad de estas personas. Apenas descubrí que esa mujer anda con una persona que para mí es basura.
Por mi parte no lo buscaré, y doy gracias porque ya no estará más este hombre en nuestras vidas.

-En un viaje que hicimos en familia a Bacalar el Sr. Sonero Mayor (El cubano) tomo la foto únicamente de la cuenta de la comida y claro que lo subió a sus estados con la famosa frase que usa cualquier naco sin dinero: “Aquí dando mis gustos porque quiero y puedo”, pero todo lo pagó mi prima. De hecho es una de las muchas cosas que solía hacer, por eso nunca confíen en los habladores y los que dicen tener mucho y nada que ver”.

La familia de Julika logró tener una vida acomodada gracias a la venta de Betterware, con puntos de entrega en Chetumal, Cancún y Mérida.

Los parientes de Julika también exhibieron al cubano. Uno de los primos de la chetumaleña publicó:

-El cubano, para no decir su nombre, a cada rato no tenía trabajo en ese entonces, pues como músico no siempre le iba bien. Mi prima todavía por ayudarlo nos dijo que si teníamos un trabajo disponible le avisemos, pero el Sr. Cubano no quiso vender porque le ofendía, así que se le ofreció un puesto de chofer para que repartiera los pedidos y cada semana le repartía a gente que se le complicaba ir a la tienda, ahí fue cuando entra la señora Victoria Cabrera, quien en ese entonces tenía una pareja que era un poco cercana a la familia de mi prima ahí por Chetumal, pues la mamá de su novio compraba Better y se le repartía.

-Cabe recalcar que el vehículo en el que repartía era una camioneta nueva que es de mi hermano, se le prestaba únicamente para repartir, y por cada semana juntaba casi 50 mil pesos en ventas. Pues de ese dinero tomaba fotos (sin que lo supiera ni mi familia ni mi prima) diciendo que era de su negocio, y pues la Sra. Victoria se creyó el cuento y así fue como poco a poco empezaron a enredarse, eso paso como a mediados de mayo pasado.

-Nos sorprende que sean amantes, ya que Victoria aún tiene fotos de su novio pintando el local de ella, todo para que al final se vaya con alguien solo por el dinero que dicho sea de paso ni si quiera era de el, ni la camioneta, nada.