MÉRIDA, Yucatán.- Algo parecido a magia blanca debe tener en las manos Marta Lorena Olvera Barbosa para que todo lo que toca se convierta en arte.

Da la impresión de que esta singular exponente de obras liliputienses traza en el aire pases mágicos que convierten masas amorfas en llamativos animales, muchos de ellos bajo amenaza de extinción, lo que además imprime a sus trabajos valiosos mensajes en defensa del medio ambiente.

En un local ubicado en un pasillo de la céntrica Plaza Diamante, que lleva por nombre Ixchel y tiene como lema “Arte en miniatura”, la siempre afectuosa Marta Lorena da rienda suelta a su creatividad. Ayudada por una lámpara que le proporciona suficiente iluminación, hace que de trozos de pasta, su material preferido, surjan flamencos, cacatúas, pájaros carpinteros, murciélagos y un largo etcétera.

Luego un minúsculo pincel culmina el trabajo dándole tonos que hacen pensar que se trata de animales reales encogidos por medios desconocidos. Uno se imagina que las garzas con el movimiento congelado dan el siguiente paso o sueltan el veloz picotazo para capturar algún pez en el agua. Casi se escucha el melodioso trinar del cardenal, la calandria, la yuya o cualquier otra de las aves que moldea con esos dedos expertos. Así de realista es su arte.

Graduada en 2003 como médica veterinaria zootecnista, la protagonista de esta historia, consumada billarista y jugadora de ajedrez (guarda en su local una pequeña y antigua computadora de juego ciencia, que ahora es de colección) también recrea escenas ajedrecísticas, varias de las cuales se exhiben en vitrinas de “Diagonales”, tienda especializada en artículos de la milenaria disciplina.

Dijes, finales artísticos plasmados sobre tableros e infantiles recreaciones de los seis trebejos: rey, dama, torre, alfil, caballo y peón, son algunos de los materiales creados por Marta Lorena que con orgullo luce “Diagonales”, los cuales pone a la venta al público. Otros locatarios del centro joyero (calle 62 con 63) lucen en sus escaparates obras de la artista, aunque no para su comercialización. Simplemente las adquieren para lucir.

De las obras sin par de esta artista plástica hay mucho por platicar, pero por ahora lo dejaremos así y más adelante llevaremos a nuestros lectores mayor material. Mientras, están invitados a visitar “Ixchel” y ver trabajar en vivo a Marta Lorena.