‘Grinch’, el malvado duende verde navideño, volvió a salir ayer jueves a la autopista que recorre los Cayos de Florida, en el extremo sur de Estados Unidos, para ofrecer a los conductores infractores de velocidad una multa o una cebolla.

El coronel Lou Caputo, de la oficina del alguacil del condado de Monroe (Florida), fiel a una tradición navideña, se volvió a poner el disfraz de ‘Grinch’ y junto con otros agentes, comenzó a observar en el radar la velocidad de los automóviles que pasaban por los alrededores de la escuela primaria de Cayo Largo en la costa sur de Florida.

A Caputo se le ocurrió la idea hace más de 20 años, inspirado en la película de 2000 de Jim Carrey ‘Cómo el Grinch robó la Navidad’, que luego se convirtió en una tradición navideña.

El agente se disfraza del personaje ficticio creado por el autor infantil Dr. Seuss para recordar a los automovilistas que deben obedecer los límites de velocidad y mantenerse alejados de los teléfonos celulares en las zonas escolares.

Cuando un automóvil es detenido, los agentes uniformados verifican la matrícula del vehículo y la licencia de conducir, detalló Caputo en un comunicado de los Cayos de Florida.

Si todo está en orden, agregó, le piden al conductor que espere en el vehículo, y es cuando aparece el ‘Grinch’ para conversar con el infractor desprevenido y a menudo asustado, para preguntarle: ¿Multa o cebolla?”.

Según Caputo, todos los conductores detenidos durante esta campaña desde su inicio hace más de 20 años eligieron la opción de la cebolla.

El oficial atribuye esto a la naturaleza inesperada de la oferta, que toma a muchos conductores desprevenidos, y bromeó diciendo que las cebollas son regalos versátiles que se pueden usar para todo, desde cocinar hasta como desodorante.