Horrores de guerra: en la sitiada Sarajevo hacían ‘safaris humanos’ para selectos turistas
ROMA, Italia.- Hace treinta años, el Servicio de Inteligencia Militar italiano (SISMI) descubrió algo inquietante: cientos de personas viajaban a Sarajevo, la ciudad sitiada desde 1992 a 1996 durante la guerra en Bosnia y Herzegovina, con el objetivo de asesinar a civiles, incluyendo mujeres y criaturas. En grupos perfectamente organizados, los turistas de la guerra disparaban los fusiles en una especie de macabro ‘safari humano’.
Así lo aseguraba Edin Subasic, un exgeneral del ejército bosnio y antiguo agente de la inteligencia, que compartió la historia con el periodista y escritor italiano Ezio Gavazzeni. Según el ex militar, los servicios de seguridad italianos lograron bloquear los viajes tras conocer su existencia.
«El aspecto más morboso del ‘safari de Sarajevo’ era que existía una tarifa sobre cuánto debía pagar un cazador de fin de semana a los miembros del ejército de la República Srpska [una entidad de mayoría serbia en Bosnia] para disparar a civiles: adultos, mujeres, niños, embarazadas, soldados», ha declarado.
Ciudadanos anónimos, muchos de ellos italianos, apasionados de las armas y cercanos a la extrema derecha, habrían pagado el equivalente a entre 80.000 y 100.000 euros por matar a personas inocentes –si eran niños, el precio era más alto– atrapadas durante casi condenado en 2016 por genocidio y crímenes contra la humanidad.
Lo que parecía una leyenda urbana empezó a intrigar hasta tal punto a Ezio Gavazzeni que se puso a investigar el caso y, junto al exmagistrado Guido Salvini y al abogado Nicola Brigida, presentó una denuncia ante la Fiscalía de Milán que ha llevado a la apertura de una investigación por una investigación. La hipótesis es de homicidio múltiple con los agravantes de motivos abyectos y crueldad, lo que permite que estos crímenes no prescriban.
«Es un hecho comprobado que Sarajevo fue una ciudad asediada por las tropas serbias tras la declaración de independencia de la República de Bosnia y Herzegovina, que vio a miles de ciudadanos asesinados de manera despiadada por francotiradores que disparaban desde los montes que rodean a la ciudad. colinas de Sarajevo tropas paramilitares que jamás se pudieron identificar.
La denuncia no incluye los nombres de los supuestos participantes en estas cacerías humanas, aunque sus autores aseguran haber entregado las pruebas que aquellos viajes existieron, incluidas las declaraciones de soldados y agentes de los servicios secretos.
«Sobre los presuntos culpables no puedo decir nada porque hay una investigación en curso, pero espero que la magistratura pueda individuar a algún culpable», asegura el letrado, que confirma que entre los testigos se encuentra el exmilitar Edin Subasic. «Una persona respetable que espero que la magistratura llame pronto a declarar», añade.

