Dos asaltos en altar mar contra embarcaciones pesqueras, cometidos el fin de semana, pusieron en alerta a los cuerpos de seguridad de Yucatán, porque no es la primera vez que se realizan atracos similares en aguas del estado.

Aunque el propietario de una de las embarcaciones solicitó a las autoridades estatales que se refuerza la seguridad en el mar, esta función no corresponde a la policía estatal, y lo que se ha hecho es turnar la petición a la Secretaría de Marina Armada de México, que es la dependencia federal que tiene la facultad de realizar patrullajes en la costa.

La SSP puede colaborar con sobrevuelos de helicóptero en la costa y en alta mar, como lo ha hecho en casos de pescadores extraviados. También por protocolo puede montar operativos en las carreteras estatales para verificar que no se saque por vía terrestre el producto robado, aunque todo indica que las especies fueron trasladadas a Quintana Roo, donde tienen su base los piratas que se dedican al robo en embarcaciones y motores fuera de borda.

Ambos pesqueros estaban en la zona en la zona del Arrecife Alacranes cuando ocurrieron los asaltos. Se cometieron a altas horas de la noche, cuando los pescadores dormían y fueron sorprendidos por los piratas.

Donde dieron el primer golpe fue en el Pescamex 41, propiedad de de la cooperativa Pescadores de Sisal, que dirige José Luis Carrillo Galaz, presidente de la Federación Regional de Cooperativas Pesqueras del Centro y Poniente de Yucatán.

Posteriormente procedieron contra el “Luis René”, del empresario Luis Alonzo Morales, afiliado a una cooperativa langostera de Chicxulub Puerto.

En ambos casos despojaron a los barcos de sus equipos de radiocomunicación para que no pudieran reportar enseguida los hechos a la Capitanía de Puerto. El llamado de auxilio se hizo a través del chip satelital del «Luis René».

Los piratas despojaron al «Propemex 41» de dos toneladas de langosta y al «Luis René» de 500 kilos.

Se reportó que la IX Zona Naval ha aumentado sus patrullajes tras el reporte de los asaltos en altar mar.

El riesgo aumenta en esta temporada vacacional porque de los puertos yucatecos salen embarcaciones de recreo que podrían tener la desagradable experiencia de toparse con los modernos piratas.