Pensando que eran los tiempos en que los yucatecos resolvían los problemas sin llegar al uso de las armas, un automovilista que pasaba por una sala de fiesta, al ver la golpiza que un sujeto le propinaba a una mujer, sacó su teléfono celular y empezó a grabar la agresión.

Lo que no esperaba era que el atacante, al ver que se tomaba evidencia de su cobader proceder, sacaría una pistola y le dispararía, con tan certera puntería que le pegó un tiro en la cara al improvisado «reportero del crimen».

Los hechos ocurrieron a las puertas de una sala de fiestas en la colonia El Porvenir, donde una mujer identificada como Carmen Miranda era sometida a una golpiza por su amoroso marido, al parecer, integrante de una corporación policiaca o militar.

En ese momento pasó por ahí Jorge Armando Can Ek, quien al ver la agresión contra la mujer instintivamente sacó su teléfono celular y empezó a grabar los hechos.

De pronto la mirada del atacante se clavó en él, pero el «testigo en video» no se amedentró y siguió grabando. Entonces el sujeto se dirigió a un automóvil y sacó un arma con la que le disparó. El tiro le pegó en el rostro a Can Ek, aunque afortunadamente solo fue de rozón.

Acto seguido, el supuesto militar o policía se dio a la fuga en un vehículo, y aunque se montó un operativo no se pudo localizarlo.

En tanto, Jorge Armando se recupera en un hospital, donde lo atendieron de una lesión en la mejilla derecha y en la barbilla.