El caso llama la atención porque el hombre, identificado como Graciliano Mex Loeza, es padre de dos hijos que también se suicidaron en años anteriores.

Graciliano recurrió a la vía del ahorcamiento, como lo hace la mayoría de los que ofrendan su vida a X’tab, la diosa maya del suicidio.

Descubrió el cadáver del campesino su esposa Addy María Nájera Soberanis, quien lo encontró colgado y enseguida lo bajó para tratar de reanimarlo, pero Graciliano ya había fallecido.

Sus parientes informaron que era diabético e hipertenso, y en las últimas dos semanas sus problemas de salud se habían agravado, combinados con una severa gastritis.

Hace dos años su hija Yolanda se suicidó tras ingerir veneneno y hace cinco años, su hijo Carlos, quien se ahorcó luego de ingerir bebidas embriagantes.