Luego de cinco años del fraude de la financiera “Mex Forest”, el juicio llega a su fin y en las primeras semanas de 2016 se conocerá la sentencia de Francisco Renán Avila Caraveo, quien está acusado de un quebranto económico de más de 10 millones de dólares.
En el caso se involucró a sacerdotes que perdieron sus ‘ahorros’ al invertir en esta casa financiera.
Tras las vacaciones decembrinas, el proceso se reanudará y se efectuará la diligencia de vista pública, que precede a la condena.
Son 91 denuncias en contra del sujeto, de las cuales seis son de seis sacerdotes yucatecos, dos de los cuales perdieron 1.3 millones de dólares, quienes invirtieron de modo personal, por lo que la Iglesia Católica no los investigó, pues se consideró un problema judicial, no eclesial.
Durante el proceso, Avila Caraveo, dijo que a quienes invirtieron se les advirtió que había riesgos en las operaciones, por lo que no todo sería ganancia.
Agunos sacerdotes, como  Luis Antonio de Jesús Ferráez Solís , por medio de representantes, reunieron entre 300 mil y un millón de dólares en efectivo, para depositarlos en “Mex Forest”.
Otros sacerdotes recurrieron a él como “asesor financiero”, entre ellos Luis Antonio Ferraez Solís, Edilberto Cauich Matú, Pedro Mex y uno más considerado ‘pez gordo’ que nunca fue identificado.
A Renán Avila se le detuvo en junio de 2010 después de decenas de denuncias por fraude.
La empresa funcionaba en Yucatán desde 2008 como supuesta intermediaria ante bolsas de valores de Estados Unidos, y operaba con la razón social IFX Market.
En las operaciones participaban también la madre del detenido, María Elizabeth Caraveo, y siete personas que nunca fueron capturadas.
Los socios ganaron inicialmente, pero los convencieron de reinvertir las ganancias y fue después cuando perdieron todo.