Mediante un acuerdo económico de 15 mil pesos y el compromiso de los agresores de enderezar su vida y ponerse a estudiar, la madre del joven vendedor de discos piratas apuñalado por dos pandilleros de la colonia Emiliano Zapata concedió el perdón.

Con esto se extinguió el proceso penal contra los acusados, uno de los cuales estaba preso en el penal meridano y el otro en el Ceama (correccional) por ser menor de edad.

El adolescente víctima de la agresión, Irving Alejandro Cachón Balam, fue atacado a plena luz del día en la calle 62 con 69 del centro de la ciudad el sábado 2 de enero.

Sus agresores fueron Irving Aquino Cetina, de 18 años, y Humberto Daniel Aquino Verdugo, de 16, quienes trataban de demostrar su valor para poder entrar a una pandilla, pues era su prueba de fuego.

Fue tal la saña del ataque que el cuchillo se le quedó incrustado en la espalda a Cachón Balam, quien fue trasladado así a un hospital.

En audiencia celebrada en el Juzgado Segundo de Control y presidida por Luis Mugarte Guerrero, se concedió el perdón a Aquino Cetina, quien fue dejado en libertad y se comprometió a no tomar represalias contra su tocayo, dijo que de ahora en adelante estudiará y cambiará su forma de vida.

Agregó que se portará bien, porque aprendió la lección y no desaprovechará esta oportunidad para recomponer su vida.

El perdón se hizo extensivo a su coacusado, su primo Humberto Daniel, quien permanecía en el centro de reclusión para adolescentes infractores, mejor conocido como Ceama.