La proliferación de pandillas en Progreso ha llevado casi a la  huelga a los panaderos, que se quejen porque no pueden circular en las calles sin que los molesten los vándalos.

Jóvenes que venden pan en triciclos han sido víctimas de robos y ataques de vándalos, que en el menor de los casos los insultan, pero en otras ocasiones los han despojado totalmente de su producto.

Cansados de esta situación, anoche acudieron a la Fiscalía Jesús I. Cetina Martínez, Ricardo Antonio Flores Trejo, Luís Alberto López Zapata y Juana María Martín Pérez, quienes denunciaron los problemas que han tenido con sujetos que dicen pertenecer a la banda “Los Sureños”.

Estos pandilleros cometen desmanes en la colonia Feliciano Canul Reyes del vecino puerto.

Los jóvenes panaderos pidieron que haya más vigilancia en las calles, principalmente en las colonias donde operan las pandillas, porque de lo contrario tendrán que dejar de vender, en perjuicio de su economía y de la gente que suele esperar al panadero en las puertas de sus casas.