La madre Teresa de Calcuta será declarada santa el próximo 4 de septiembre por el Papa Francisco, 19 años después de su muerte.

De pequeña estatura, firme como una roca en su fe, Agnes Gonxha Bojaxhiu, mundialmente conocida como la «Madre Teresa de Calcuta», nació el 26 de agosto de 1910 en la ciudad de Uskub (Albania), actual Sopje, capital de la República de Macedonia.

La madre Teresa de Calcuta es conocida por haber dejado como legado su caridad y una gran labor humanitaria con los pobres e indefensos.

Agnes Gonxha Bojaxhiu descubrió su vocación cuando tenía dieciocho años, y en 1928 decidió que estaba destinada a la vida religiosa. Fue entonces cuando optó por cambiar su nombre a «Teresa» en referencia a la santa patrona de los misioneros, Teresa de Lisieux.

Tras profesar sus votos en 1931, fue destinada a Calcuta, en India, donde comenzó a trabajar como profesora y más tarde optó por la ciudadanía de este país asiático.

En 1950 fundó la congregación de las Misioneras de la Caridad cuya misión es encargarse de los más pobres y de todas las personas no queridas.

Las primeras adherentes fueron 12 jóvenes y para ellas la Madre Teresa estableció un simple hábito blanco con líneas azules porque era el más barato y reflejaba los colores de la casta de los intocables, la más pobre de la India.

En la década de 1960, el mundo comenzó a fijarse en la Madre Teresa y en la obra que ella había iniciado, por lo que recibió numerosos premios, comenzando por el Premio Indio Padmashri en 1962 y de modo mucho más notorio el Premio Nobel de la Paz en 1979, al mismo tiempo, los medios de comunicación comenzaron a seguir sus actividades con un interés cada vez mayor.

En 1997 la Madre Teresa bendijo a su recién elegida sucesora como Superiora General de las Misioneras de la Caridad, para luego viajar y encontrarse por última vez con el Papa Juan Pablo II, volvió a Calcuta donde transcurrió las últimas semanas de su vida.

El 5 de septiembre, la vida terrena de la Madre Teresa llegó a su fin. El gobierno de India le concedió el honor de celebrar un funeral de estado y su cuerpo fue enterrado en la Casa Madre de las Misioneras de la Caridad.

Su tumba se convirtió rápidamente en un lugar de peregrinación y oración para gente de fe y de extracción social diversa.

A dos años de su muerte, el Papa Juan Pablo II permitió la apertura de su Causa de Canonización tras los favores que se le atribuían y el 19 de octubre de 2003 fue proclamada beata.

Aunque la mayor parte de las canonizaciones suelen llevarse a cabo en la Plaza de San Pedro, no se descarta una sorpresa del pontífice y un viaje a la India para el próximo 4 de septiembre.