Directivo preso de Crecicuentas recurre a Derechos Humanos por una i fección

Uno de los directivos encarcelados de Crecicuentas sufrió una infección en la cara, lo que aprovechó para anegarse malos tratos en el penal meridano y recurrir a la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Yucatán.
En diligencia ante el juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero, el abogado de los detenidos solicitó su intervención por el presunto maltrato en agravio de uno de sus defensos.
En prisión están Jorge Alberto, Miguel Angel y Claudia Rubí Argáez López, y la madre de ellos, Lina Rubí de Guadalupe López Conrado, todos directivos del “Sistema Crecicuentas” y acusados de fraude.
Ahora, la defensa aduce que a uno de los hermanos Argáez López algo le picó en la cara y le provocó una seria infección, por lo que tuvo que ser sometido a una intervención quirúrgica.
Ante la queja, sea abrió una investigación para conocer los pormenores del presunto maltrato de persona.
Como hemos informado, los hermanos Argáez y su madre están acusados de fraude múltiple, que tan solo en el caso de la señora Margarita Ucán Sánchez asciende a 439 mil 003.13 pesos.
Los hechos datan de marzo de 2012, cuando estas personas se ostentaron como socios de la empresa denominada «Sociedad Cooperativa de fomento regional sociedad cooperativa de ahorro y préstamo de R.L. de C.V.», aunque no figuran en el acta constitutiva, y mediante el engaño en juntas y reuniones en casa de la denunciante, ubicada en Oxkutzkab, ésta les entregó la cantidad antes señalada.
Para junio de 2015 la denunciante solicitó de nuevo su dinero, pero le informaron que no se lo devolverían y que todo había sido un engaño.
Los directivos enfrentan tres procesos distintos, uno en el fuero común y dos en el nuevo sistema de justicia penal, eso sin contar los del ámbito federal, donde se acumula en grueso de los expedientes en su contra.
También están involucrados en este asunto Lourdes Andrea Argáez López, Carlos Javier Cámara Martínez, José Abel Ordaz Gutiérrez y Miguel Angel Argáez Ordaz, algunos con amparos y otros prófugos.
Todos empleaban las supuestas empresas “Crecicuentas”, “Hagamos Más”, “Cooperativa de Fomento Regional S.C. de A.P. de R.L. de C.V.” y “Esperanza Equitativa S.C. de A.P.de R.L. de C.V.”, que es lo mismo que la primera.