Después de más de 20 años de prueba y error, unos investigadores japoneses han producido cebollas que apenas emiten los gases que irritan los ojos y causan lágrimas al cortar la hortaliza
Se ha realizado una prueba de ventas de esta cebolla no lacrimógena, llamada Smile Ball, en los grandes almacenes y tiendas en línea de Tokio, donde se han vendido casi cinco toneladas.
Las cebollas se venderán en los supermercados de todo el país este otoño, aunque todavía no se ha especificado la fecha de inicio.
Costarán 450 yenes en envases de dos, aproximadamente el doble del precio que las cebollas tradicionales.
Supuestamente, la Smile Ball no posee el olor característico de las cebollas estándares y, cruda, tiene un dulzor similar al de las manzanas o al de las peras Nashi.
Pero ¿qué opinan los japoneses de este alimento revolucionario? No están muy entusiasmados, a juzgar por algunos comentarios en internet.
“Pero ¿cuál es su contenido nutritivo?”.
“Ya saben que, si se enfría una cebolla en el frigorífico, se puede cortar sin llorar, ¿verdad?”.
“A medida que envejecemos, dejamos de generar lágrimas de forma natural, así que olvídense de eso y hagan algo con el olor”.
Aunque la Smile Ball no parece estar causando muchas sonrisas, a juzgar por la prueba de ventas el año pasado, hay muchos consumidores que están dispuestos a pagar por ella.