Una mujer condenada a 20 años de prisión por el asesinato de su esposo sufrió serio revés al ser ratificada la sentencia, ya que su defensa no logró acreditar que sufría el «síndrome de mujer maltratada” al momento de cometer el crimen.

Celia García Reyes fue condenada el 30 de septiembre de 2013 a 20 años de cárcel y a la reparación del daño mediante el pago de un millón 231 mil 282 pesos con 80 centavos, advirtiendo que la acusada no podrá obtener otros beneficios preliberatorios o de semilibertad.

Los abogados de oficio interpusieron un recurso de reposición de juicio oral, pero por unanimidad de votos el Tribunal Superior de Justicia dictó fallo de condena en contra de la acusada.

La defensa trató de aportar pruebas con la finalidad de acreditar que Celia actuó bajo alguna causa de exclusión del delito, específicamente bajo el “síndrome de mujer maltratada”.

Se ofreció el testimonio de la hija menor de la sentenciada y de una perito en psicología. Sin embargo, la menor manifestó su deseo de no rendir testimonio.

En el contrainterrogatorio que hizo la psicóloga, se determinó que Celia García no padece dicho síndrome.

Los hechos ocurrieron el 9 de marzo del 2013, cuando José López Zavala y su esposa se embriagaban en el predio 465 de la calle 64-A entre 73 y 75 de la colonia Cerritos de Mulchechén, Kanasín.

De pronto discutieron y el hombre golpeó a Celia, quien tomó un cuchillo y se lo clavó en el abdomen. A pesar de estar herido, José López salió a la calle, donde su esposa lo remató con nueve heridas más, una de las cuales le perforó el corazón.