Gerardo Manuel Santos Ortiz fue liberado luego de que su pareja sentimental le otorgó el perdón en un caso de abuso sexual que conmocionó hace una semana, pues la víctima es una niña de un año de edad, que fue violada con un objeto extraño.

Aunque el delito se persigue de oficio, en realidad se le liberó porque la mujer puso en duda la acusación al señalar que él no era el único que se quedaba a solas con la niña, dejando entrever que el abuso pudo ser perpetrado por un niño de ocho años o un adolescente de 16.

El martes 1 pasado el sujeto fue declarado bajo prisión preventiva por haber violado a la bebé y permaneció en el penal hasta la audiencia de vinculación a proceso, que se realizó el viernes 4.

Ese día la madre de la niña habló a favor de Santos Ortiz, quien fue detenido en cumplimiento de una orden de aprehensión y presentado ante el juzgado de control con sede en Kanasín.

La declaración de la mujer puso en duda la culpabilidad del individuo, empleado de un banco, pues dijo que no fue el único que se quedó a solas con la niña sino también sus primos de ocho y 16 años de edad, cuando estaba al cuidado de su abuela paterna.

De acuerdo con el expediente, Gerardo Manuel fue acusado de ultrajar a la hija de su pareja sentimental, de un año de edad, para lo cual utilizó un instrumento distinto a su genital. Los hechos habrían ocurrido en días pasados, entre el 23 y el 25 del mes de octubre.

Aprovechó que se encontraba solo con la pequeña y le introdujo un instrumento por la vía vaginal. El sujeto tenía libre acceso a la menor por ser el amasio de la madre de ésta.